Este estudio de caso aporta información sobre las políticas y prácticas de Costa Rica consignadas a garantizar que su infraestructura crítica sea más resistente frente a futuros desastres. Proporciona una visión general de la capacidad y el progreso de Costa Rica en la evaluación de la vulnerabilidad y la criticidad de su infraestructura. También analiza los mecanismos del gobierno y las finanzas destinados a la resiliencia de la infraestructura crítica, destacando las buenas prácticas e identificando los cuellos de botella.